( ó 1,2,3 por mí y por todos mis compañeros)

Corría el año 2019 y LasTesis hicieron por primera vez su Performance en el contexto de la lucha contra la violencia de género. El lugar: Valparaíso, plaza Aníbal Pinto. Un grupo compuesto por cuatro mujeres que cantaron, bailaron y representaron- sin miedo al que dirán- lo que nadie decía. Nombraron al velo que lo cubre todo desde hace milenios y del que hasta ése entonces nadie hablaba:

EL PATRIARCADO. La gran venda social.

Hace 6000 años que el patriarcado persigue, denigra, mata, erosiona, invade, conquista -así como también- piensa, construye, conoce, desarrolla, se amplifica; pero como el gran dios hebreo o egipcio (o Voldemort), era innombrable y al parecer en eso radicaba gran parte de su poder. Estas mujeres lo gritaron, pusieron voz a lo que otra mujer: Rita Segato, con una notable experiencia de campo en uno de los lugares más violentos para las mujeres en el mundo, se atrevió a concluir:

“La violación está fundamentada no en un deseo sexual, no es la libido de los hombres descontrolada, necesitada, no es eso porque ni siquiera es un acto sexual, es un acto de poder, de dominación, es un acto político.”
Rita Segato.

Ésta es LA TESIS en que LASTESIS se basaron para hacer su arte: hay un violento orden social que determina que las mujeres deben ser sometidas por el poder y si no asesinadas. Esa es la ley con que se formó nuestro “juez”. La ley del “padre” que funciona como el gran ordenador de todo, como el gran jefe, la base racional de la existencia. La evidencia ha sido abundante a lo largo de la historia: violaciones en las guerras, también en la pedofilia y en todas aquellas prácticas en que es la dominación del otro y no el deseo por el otro es lo que domina la conducta.

La evidencia está presente hasta nuestros días: las mujeres asesinadas por hombres en el mundo son siempre más que los hombres asesinados por mujeres.

Punto aparte merecen las mujeres que matan a mujeres; ésas que son “matriarcales” y expresan la misma violencia pero hacia su propio género. No son mujeres que asesinen cuerpos; pero son Juezas agudas que condenan a muerte vidas, ideas, sexualidades, decisiones, afectos. Sororas siempre y cuando no les salga competencia o voz en contra. Patriarcales igual.

Si alguien entendió que esto se trataba de hombres y mujeres y no de femenino y masculino – que es distinto- está en un grave error. Nadie pretendería hacer equivalentes las condiciones biológicas de mujeres y hombres; pero si se trata de avanzar hacia un camino más equitativo entre lo femenino y lo masculino. Para eso se necesitaba ponerle el cascabel al gato, nombre al paradigma y LasTesis lo hicieron con gracia y resonancia por todo el mundo – literal- . ¿por qué entonces tanta defensa? ¿por qué tanta burla y resistencia?

ESTE PÁRRAFO ES PARA MIS QUERIDOS AMIGOS HOMBRES. ESTOY PENSANDO EN USTEDES CUANDO ESCRIBO ESTO: los conozco, son buenas personas, protectores de la naturaleza, respetuosos de la vida humana, del mérito y el esfuerzo, la vocación. Conocedores de las buenas prácticas, inclusivos, apoyadores de sus parejas;¿por qué se han defendido tanto frente a poner en evidencia la Violencia de Género? ¿La ley Karin? ¿La ley de acoso callejero?. Los veo y creo que justo ustedes son los mejores representantes del buen actuar, no es para ustedes la ley, es justamente para el que no está dispuesto a detenerse y a respetar a otro por ser mujer ¿se entiende? Es justamente para los que no han entendido lo que ustedes llevan a cabo tan bien, (igual que los lomos de toro no son para los que respetan la velocidad, pero los bancamos todos)

Estamos a 2024, han pasado 5 años de la “cancioncita” (que tuvo réplicas a nivel mundial), y ¿en qué estamos? ya podemos decir patriarcado sin ser feminazis? ¿Ya podemos entender que es un orden de las cosas sobre utilizado, efectivo para algunas cosas y muy dañino para otras? ¿Podemos dar un paso adelante intentando desde la crítica constructiva hacer un modelo mejor?

Creo que no, creo que nos estamos quedando todos repitiendo en esto precisamente por los que se niegan, se asustan y en definitiva se defienden antes de entender que la cura de nuestro males no viene en frasco patriarcal. Retrasan el cambio. Patriarcado ha significado conciencia, individuo, pero también desmembrarnos el afecto, negar las emociones, los procesos profundos. Desde el 2019 hasta acá no hemos entendido la profunda observación de Rita Segato, nos sigue gustando el poder, tener la razón, levantar el dedo acusatorio, a todos. A las mujeres y a los hombres.

El Patriarcado está en la religión, en la ciencia, en nuestros pensamientos, relaciones y en todos aquellos que lo mencionan como un mal del que están ajenos. Estamos y hemos estado miles de años respirando esta atmósfera. No desde siempre, porque hace mucho tiempo que otra grande de la Antropología – Marija Gimbutas- nos contó que las cosas no son así desde que “mundo es mundo”. Existieron en la “Vieja Europa” 3000 años de convivencia y existencia igualitaria, participativa, con desarrollo tecnológico y científico antes de los Kurgans (tribus indoeuropeas que invadieron con el nuevo modelo de orden social, espiritual y “natural”).

Desde el 2019 hasta acá hacemos fila para ver cual feminista es más feminista, cual hombre deconstruido es más deconstruido, cual humilde es más humilde y quién tiene menos ego. Seguimos queriendo ganar. Los hombres se sienten atacados (más nunca quemados en la hoguera ¿no?), las mujeres acusan a las otras de feminazis, amargadas, amachotadas y curiosamente, muy curiosamente hay poca dedicación a investigar, a entender ¿qué me tapa esta venda patriarcal? ¿Por qué quiero conservar esto? ¿Qué he dejado de mirar? . Tener perspectiva antes de emprender el viaje o el juicio.

Abrazar los afectos, porque ahí donde no hay amor señoras y señores, se instala el poder (y el dinero, o quizás es lo mismo) con una ferocidad que lo consume todo. ¿Con qué puedo aportar si me saco la venda? Sería fenomenal esa pregunta.

Y son 6000 años, nadie puede levantar la mano y estar fuera de esto. Aquí somos todos patriarcales y no alcanzaremos a dejar de serlo, pero empuja hacerse las preguntas hacia adelante, en vez de defenderse del pasado sin mirar ¿por qué? . Y es importante empujar, porque quizás lo más antipatriarcal del patriarcado es que la masa humana sigue afectándose como una sola (¿o no aprendimos nada con el Covid?), funcionamos como especie a la hora de sobrevivir o nos vamos cortados (extintos en chileno).

Nos guste o no: somos todos uno. Aquí es 1,2,3 por mí y por todos mis compañeros